Sobre "La Soledad"

Camino conmigo, me consuelo, me abrigo. Me escucho atento pues no tengo otra opción que entenderme. Camino entre la gente, y me pierdo al andar. Fumo como loco, me concentro, me ahogo. Me canso de todo por que ando de a uno. Pasan los segundos y no haz de llegar. Despierto solitario, me ducho, me cambio. Comienzo con la rutina del trabajo. Almuerzo mientras dialogo de la “crisis mundial” con mi ensalada “roquefort”. Me siento mejor, cuando me aferro a la idea de que vas de regresar. Veo parejas todo el día, felices, sinónimos de alegría. Las veo y me comienzo a cuestionar. Habrá de pasar mucho tiempo para estar así. Me empiezo a deprimir, cuando volteo y no estas.

Salgo con los amigos, celebro, me rio. Todo por minutos parece estar bien. Comprende la “mente” de que en realidad soy más que feliz. Que no estoy solo ni llegaré a estar así. Pero es diferente, esta ese vació de no estar completo. Comienzo de nuevo a sentirme soledad. Llego algún lado, molesto, fastidiado. Llego con la “monotonía como himno”. Lo” mismo de lo mismo” me espera a al final. Quisiera salir, compartir. Cambiarle la vida a alguien y que transformen la mía de paso. Quisiera dejar de ser uno y ver dos huellas más de zapatos.

Convivo conmigo. Me preocupo, sobrevivo. Voy día a día “siendo mejor”. Pasan los días, me divierto como nunca. Pero siempre “cuelga” esa pregunta, de saber si vendrás hoy. Camino conmigo, te sueño, suspiro. Se quita la duda sobre la “soledad”. Llegaste, o tal vez mañana lo harás.