12/10/08

Tardes de Cinerama

Recuerdas las tardes en el cine? El rato especial de sentarnos a conversar de la semana, mientras esperábamos impacientes la llamada del comienzo de la película. El olor en el ambiente del pop corn caliente, llenaba nuestros rostros de risas al inventar bromas para ti. Estábamos juntos un Sábado y eso era todo lo que valía. Podíamos vivir casi por una hora cuarentaa, historias nuevas que tal vez nunca nos pasarían. Recuerdo las películas en mi mente y cada roncada o risa producidas por ellas. No importaba más, solo estar a tu lado y callar a los demás. Siempre me gusto el Cinerama porque lo conocí junto a ti. Ahora cada vez que paso por ahí recuerdo tanto que casi estoy adentro de el.




La cuarta fila, en la sexta butaca era la ubicación y ideal para ver lo que vendría. Cuando el anuncio de apeguen celulares resonaba en la sala, yo ya estaba preparando mi brazo para que te sientas más que cómoda. (aunque mi circulación se vea muy afectada). Hubieron fantasmas, princesas encantadas y cantantes de salsa. Salimos felices y pensativos. Alegres o emotivos, ya que cada película era un resultado diferente.

Nos tocaba irnos del espacio mágico del cine y su pantalla tamaño pared. Salimos con el frió en las manos y con la imagen del "final feliz" aun en la mente. Apurados muchas veces por la hora que nos ganaba la partida. A veces el tiempo era bueno e íbamos a "San Antonio" a repartir besos. A probar un dulce recomendado o para hablar más de más. Lo recuerdo como ayer.

Cada vez que paso por Miraflores y me encuentro en la puerta del Cinerama, entro y me quedo un rato viendo si estas esperándome por ahí.

Recuerda.. la función no volverá a empezar sin ti.